Fibra óptica vs cable: todas las ventajas e inconvenientes

No todas las conexiones de fibra óptica son iguales, lo que afecta a prestaciones como la velocidad

 

Fibra vs cable 

¿Hay distintos tipos de fibra óptica? ¿Quién usa fibra y quién no? La ‘fibra óptica’ de algunas compañías, como ONO, es en realidad un híbrido entre fibra óptica y cable coaxial, lo que se conoce como Híbrido Fibra Coaxial (HFC). El acceso a la Red se hace a través de un módem con entrada de cable coaxial. Estos operadores ofrecen fibra pero esta solo llega hasta un nodo cercano; desde allí hasta tu domicilio lo que llega es un cable de cobre coaxial. Es decir, la fibra llega solo hasta tu barrio o urbanización y luego se despliega cable coaxial hasta dentro de cada vivienda.

El cable-módem divide la red HFC en dos canales, uno de descarga y uno de subida. En su día fue toda una revolución, pero hoy en día hay compañías que ofrecen fibra óptica hasta el hogar, hasta el propio salón. En el caso de la conexión por cable, el ancho de banda, es decir, la velocidad total de la red, se reparte entre todos los vecinos. Si hay poca demanda no hay problema, pero si se satura en algún edificio o calle los usuarios pueden notar que sus conexiones van lentas. Además es un sistema más fácil de espiar.

La Fibra de Orange o de Movistar, en cambio, es fibra cien por cien, es decir, la fibra llega hasta el propio domicilio del usuario. Esta tecnología se conoce como Fiber To The Home (FTTH), que significa, como ya hemos dicho, fibra óptica hasta el hogar. La principal ventaja es que ofrece velocidades (tanto de subida como de bajada) mucho más altas que el antiguo cable coaxial.

Estas operadoras están mejorando los ‘routers’ actuales pero de momento algunas todavía usan un conversor óptico-eléctrico también conocido como ONT. Este conversor es otro aparato que el técnico nos instala y es el encargado de transformar los fotones en electricidad. De ahí va al ‘router’ por medio de un cable Ethernet (si es que el ‘router’ no está integrado con el ONT).

Hay que tener en cuenta que la fibra óptica no necesita tantos repetidores y puede funcionar sin ellos en distancias de 2 a 70 kilómetros. Con amplificadores láser puede llegar a los 150 kilómetros. Por lo tanto, la conexión se supone de mayor calidad. Además, esta tecnología no sufre interferencias procedentes de cambios de tensión, temperatura o cables, ni pérdidas en función de la distancia a la centralita, como sí ocurre con el ADSL. Por lo tanto, desde el punto de vista del usuario, las ventajas de la fibra óptica son claras respecto al cable o al ADSL.

Si hay que destacar su principal atractivo este es sin duda que mantiene siempre una velocidad constante, ya que, como acabamos de comentar, es difícil que sufra interferencias. Además, siempre alcanza el máximo de la velocidad contratada, a diferencia de lo que ocurre con el ADSL, que solo a veces llega al 80 o 90 por ciento de la velocidad que pagamos.

Como punto en contra está el precio. Las operadoras ofrecen paquetes de fibra óptica no muy baratos, y si además queremos cambiar un ‘router’ por nuestra cuenta por otro más potente también vamos a notar que son mucho más caros los de fibra. Pero también es cierto que comienzan a aparecer más compañías que ofrecen fibra y esto hace que haya más oferta.

 

El crecimiento continuo de las energías renovables

La capacidad de generación de energía con fuentes y tecnologías renovables aumentó a escala mundial en 161 gigawatts (GW) en 2016, lo que representa el año con el mayor crecimiento en este tipo de recursos energéticos, según datos publicados por la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA, por las siglas en inglés).

Aerogeneradores, parque de energía eólica en Costa Rica

Informe de energías renovables en el mundo

En él se recoge que en el año 2016 se marcó un nuevo récord en cuanto a la instalación mundial de potencia eléctrica renovable con un total de 161 gigavatios.

Esto supone un incremento de aproximadamente un 9% con respecto a lo acontecido un año antes, lo que suma una potencia eléctrica total de 2.017 gigavatios a nivel mundial.

Si nos centramos en las distintas energías renovables, es la energía solar fotovoltaica la que destaca por encima del resto con aproximadamente un 47% de la potencia total instalada, seguida de la energía eólica con un 34% y la hidráulica con algo más del 15%.

El futuro de las energías renovables

El informe apunta una cuestión que es muy importante de cara al devenir próximo de las energías renovables a nivel mundial.

En determinados países como Dinamarca, México o Emiratos Árabes Unidos se fijó el precio de la electricidad con origen renovable en 0,05 $/kWh, lo que supone un valor inferior a los costes de generación que tienen buena parte de las instalaciones convencionales, y sin contar con apoyos gubernamentales.

Se ha puesto de manifiesto que los picos que se requieren de potencia eléctrica en algunos momentos se están cubriendo ya con tecnologías renovables, por lo que la capacidad que se tiene de cubrir las necesidades de un país con fuentes renovables es ya una realidad.

Este hecho se ha producido por ejemplo en Dinamarca, un país completamente desarrollado y con altas necesidades energéticas.

El informe recoge también que se han llevado a cabo proyectos de almacenamiento energético por un total de 800 megavatios de potencia instalada, lo que supone una capacidad mundial total de 6,4 gigavatios.

Igualmente señala que es preciso realizar esfuerzos en el aprovechamiento térmico de las fuentes renovables o en su utilización en el sector del transporte, ya que éstas todavía no se han desarrollado lo suficiente frente a los combustibles fósiles.

El cuidado del medioambiente

Hay que destacar la importancia que tiene el aprovechamiento de los recursos energéticos renovables desde el punto de vista medioambiental, si lo que se pretende es cumplir con los compromisos mundiales sobre cambio climático, concretamente con el Acuerdo de París, en donde se limita el incremento de la temperatura media anual por debajo de 2 ºC.

Año tras año se está instalando más potencia que utiliza fuentes renovables que la corresponde a tecnologías convencionales.

Esto lleva asociada la necesidad de realizar infraestructuras energéticas del tipo redes de transporte y distribución, sistemas de información y comunicación, almacenamiento de energía, etc., por lo que las inversiones que se realizarán en los años venideros serán muy elevadas, así como la necesidad de contar con profesionales competentes en la materia.

Informe estadístico de referencia:

Renewable Energy Capacity Statistics 2017